A Carlos Asnaghi (eco de sus palabras en el Fuerte Barragán, el 25 de mayo de 1997)

Necesitamos tu fuego,
tu vehemencia, tu palabra,
tu emoción de ensenadense,
tu Bandera sin pancarta.
Necesitamos la esencia
de la historia y recordarla,
caballero, honor y estudio,
allí estás para nombrarla.
Escucharte hablar del tiempo
de las glorias de Ensenada,
es alimentar el duende
de la ilusión en la entraña.
Es colmarse de alegría
por los valores que ensalzas
de los hechos que enraizaron
las virtudes de una raza.
Es creer que aún es posible,
con tu experiencia ganada,
volver a sembrar el surco
y retemplar la esperanza.

Algo cálido nos nace
desde el fondo de las almas,
quizás sea chispa encendida
de tu llama que contagia.
Con un temblor en los labios,
con la mirada nublada,
con nuestras manos tendidas
en una ronda enlazadas,
sólo queremos decirte,
que te debemos un Gracias!,
y el venero de tu nombre,
para siempre, en Ensenada.

                 Nury Busquets de Miguel



Fuente: Busquets de Miguel, Nury. "Ribereña". Buenos Aires, 1998.

Escritora ensenadense